Hace frío el calor devora mis entrañas oh cristal reflector de las cosas ante mi mirada quiébrate en años de maldición en las supersticiones banas y baratas de preescolar mientras las polillas dan cuenta de los grimorios entre la paja los pescados relucientes que saltan atrapados entre el conocimiento y la sabiduría. Corre vientre dios idiota en la oscuridad de una eterna noche entre densidades de paz y tormento en la galerna de herradillos que surcan las cortezas aéreas la alegría de Eideen y la tristeza que viste falsos andrajos y calza zapatos… y destrucción… quiébrate cristal ante mis ojos antes de que éstos se rompan.
Apolonio Guillian