Sin tu pulsación a mi lado, sin latidos ni espíritus que rodeen mis cabellos con el impulso de tus manos, que monstruosa y absurda es la existencia sin nada por lo que merezca la pena estar vivo, amor, ven a las faldas de mi atmósfera y colorea mis substancia con la esencia de tus caricias y llena de Ideales Excelsos la música silenciosa que embarga las latitudes perdidas de mi alma.
APOLONIO GUILLIAN