En los conos iconoclastas que merodean por el ahora hay límites: si te sales te decapitarán y más si despuntas en poesía: tu cabeza rodando por los suelos a patadas por los altos estamentos, mas no quiero desanimar, la sangre que manará de vuestro cuerpo manchará las piedras y el sol lo verá en un cúmulo de venganzas que harán que los malvados nunca tengan paz mientras a vosotros lo Arquetípico y lo Primordial os rendirá pleitesía coronándoos con átomos la frente y en las mano la guillotina astral como «Demonios Lunares o Reyes Cornudos (por las puntas de la Luna)» dispuestos a liarla en una justicia que va más allá de la humana y ostentar la victoria final en el arco de las iluminaciones que rotará colocando a cada cosa a su lugar y los lamentos de los asesinos que querían que prevaleciera el status quo en la sociedad y que fueron conscientes del mal pero inconscientes de que la muerte llegaría y con ella la Verdad y el Amor que los destronaría de un mundo parcial y hecho a medida para que cada uno de ellos como un Tetris demoníaco fueran cada uno a su sitio. ¡Poetas en autenticidad! ¡Poetas en peligro de extinción! ¡Si no corre sangre por vuestras plumas como manantiales el verdadero Parnaso no será para vosotros!
GABRIEL